.

¡Maldita Razón!
Que envenena al hombre.

Que le quita la libertad,
aún para hacer el mal.
Le roba horas de dolor,
haciéndole fingir felicidad.

De Dios le hace dudar
y aún de la existencia misma.
Le muestra caminos de gloria,
donde ya el primer peldaño
es obscuro vacilante e incierto.

¡Maldita Razón!
Que turbas la mente.
Quien fuera nube para viajar
el mundo entero.

Y sin Razón,
dejarse llevar del viento
y llover en llanto tormentoso
para luego en el mar, reír.

Reír a carcajadas, en la alegre
espuma juguetona del océano,
creyendo más a la existencia
que a la vida.

Y, sin proferir jamás
blasfemia alguna,
ni suspiro descontento,
con Razón o sin ella,
volver al espacio eternamente.


E.E.R. LEFEVRE DE WIRZ

.

Siente su interior explotar.
Su mente acosada
por el pensamiento
no cesa de crear.

Como reactor atómico
debe cuidar
la “criticidad” del momento
podría explotar.

Igual... el poeta
deshacerse debe,
de esas fuerzas extrañas
que surgen de sus entrañas.

Dejando correr su pluma
sobre el suave papel,
como acaricia una mano
febril y amorosa
por última vez.


E.E.R. LEFEVRE DE WIRZ

.

Para qué vivir?
Preguntome un día Inés.
Yo me asusté y contesté
después ~ No sé ~

Pero un loco te dirá
que vivir es para triunfar,
ser rey y poder mandar;
mientras el niño dirá:

Que es para gozar,
correr
contra el viento y
mojarse en la lluvia.

Reír por mucho y por nada
Mirar las estrellas
ponerse a llorar,
besar a mamá.

El sabio, Inés,
verá la vida para conocer
del universo su saber,
y en él encontrará la fuerza del bien.

Pero yo poeta, triste de mí.
Yo no sé para que...
> Read article

.

El verdor mágico de tonos caprichosos
con que la he visto engalanarse
desde la comarca del Barú,
las provincias centrales
y tierras de Bayano
vivirá en mí,
como símbolo de esperanza
y cuando a Ella vuelva,
serán realizaciones,
toda es esperanza.

Adiós... adiós
Tierra Madre.
Corta será la ausencia,
pero en faltándome
tu cálido abrigo,
bien sé que esta
será una eternidad.
Adiós, adiós.
Te digo Patria, y con ello
oprímeseme el corazón.


E.E.R. LEFEVRE DE WIRZ

.

¡Libertad, como te amo!
Pero eres cruel y tirana.
Se oye tu voz
pero escondes el rostro.

Solo aprisionada en el silencio,
el deber y el amor
del mundo esclavo,
se te ve.

Tú eres la antesala
del paraíso,
pero a tí se llega
arrastrando sumisión y cansancio.

La libertad plena
en la tierra no existe.
Y la otra, libertinaje,
es fatal.

Libertad ¡oh cuánto te amo!
sueño sutil alcanzarte.
Rompamos cadenas
que tristes pasiones ataron.

Pero luego...
¿Dónde encontrarte?
¿En el...
> Read article

.

Me senti envejecer
en plena juventud,
cansada de la vida,
como si ya la hubiera vivido.

La melancolía des pasado
me apresaba como el recuerdo
de una ilusión frustrada
en cabeza blanca de abuela.

Parecíame ver el ocaso.
¡Gran sandez!
Lo más banal de mi existencia
¡añorar!

Pero sobra razón, los años de rosa
perfumandos con la inocencia y bondad,
no volvérãn.
Viviremos otros quizãs heroicos
de la lucha en voluntad forjados

Con la niñez muere la inocencia
el adolecente se llena de avidez
y...
> Read article